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¿Por qué trabajar desde casa? Ventajas y desventajas
El 2020 fue el año del trabajo remoto. Y llegó sin avisar. Tras el estado de pandemia a causa de la covid-19 declarado en todo el mundo, nos encerramos en casa y tratamos de seguir engrasando la gran rueda laboral a través de nuevos retos y desafíos.
Se trataba de la antesala a un año 2021 en el que el teletrabajo se ha convertido en la norma y, quizás, así se mantenga durante mucho tiempo en ciertos sectores. Bill Gates también piensa lo mismo: “Más del 50% de los viajes de trabajo y más del 30% del trabajo en la oficina desaparecerán en 2021”, aseguraba el dueño de Microsoft a principios de enero.
Trabajar en casa es la tendencia y debes aprovechar todas tus cualidades para adaptarse a esta situación. ¿Cómo? Potenciando tus mejores skills acordes a la demanda y optar por un empleo que te permita trabajar desde tu cuarto, tu terraza o incluso otro país.
Ventajas de trabajar desde casa
Mayor productividad
Trabajar en una oficina concilia a un equipo pero también supone muchas distracciones: tareas multitasking impuestas, reuniones innecesarias y demasiadas escapadas para “tomar café”. Trabajar en casa te permite ser dueño de tu propio tiempo y organización, con todo lo bueno que ello conlleva.
Ahorro de tiempo y dinero
¿Dos horas en bus para ir a trabajar? ¿Demasiados bocadillos caros en la cafetería de la esquina? Según los directivos de APD, un empleado puede llegar a ahorrarse un 15% de su sueldo trabajando desde casa. Siempre, eso sí, en función de su situación, transporte y ubicación.
Conciliar la vida personal
El ahorro de tiempo en desplazamiento también te permite conciliar mejor tu vida personal: puedes pasar más tiempo con tus seres queridos o conseguir tiempo para estudiar ese curso que siempre quisiste. De esta forma, los objetivos personales son más abordables al trabajar y vivir en un mismo espacio.
Desventajas de los trabajos online
El espacio físico
Uno de los principales problemas de trabajar en casa para algunos profesionales reside en la falta de medios para adaptar el hogar al espacio de trabajo. Durante los últimos meses, la demanda de equipos informáticos, escritorios y demás aliados para el trabajo remoto se ha disparado. En este caso, nuestro consejo es diferenciar los espacios y consolidar una distribución lógica: nada de trabajar en la cama o comer sobre el ordenador.
Sedentarismo
Comer más chips de la cuenta, pasar del escritorio al sofá o consumir más series que antes. Si trabajas en remoto, es fácil iniciar una cadena de sedentarismo cada vez más recurrente. En este caso, te sugerimos adoptar una rutina y salir a practicar deporte o, incluso, realizar actividades como yoga en casa para ejercitar el organismo y desconectar del flujo de trabajo.
Fuente: Universia